Maria Antonia Walpurgis Sinforosa (1724-1780), princesa de Baviera y Electora de Sajonia, fue una mujer extraordinaria: cantante, clavecinista, compositora, libretista, pintora, mecenas, miembro de la influyente Accademia dell’Arcadia, empresaria y mujer de Estado, dejó una profunda marca en el mundo cultural de su época.
Nacida en el Palacio de Nymphenburg en Munich, creció en un ambiente de altos estímulos: fue formada en las diversas artes y, tras estudiar con Giovanni Battista Ferrandini y Giovanni Porta, continuó su formación musical con Nicola Porpora y Johann Adolph Hasse en la rica Dresden tras su matrimonio con el heredero al Electorado de Sajonia Frederick Christian en 1747. Imbuida en el estilo musical de la ópera seria de sus maestros e influida en su producción literaria por los arcádicos, sus textos fueron puestos en música por ella y por los músicos de su corte.
Como compositora, Maria Antonia firmaba con su pseudónimo de la Accademia: Ermelinda Talea Pastorella Arcade, o E.T.P.A. Se conservan dos óperas suyas: Talestri, Regina delle Amazzoni, y el dramma pastorale Il Trionfo della Fedeltà, en las que además participó cantando el rol principal.
Sus Sei Arie para soprano, cuerdas y continuo, que estrenamos en concierto en tiempos modernos, fueron escritas en sus primeros años en Dresden. Conservadas en bellos volúmenes manuscritos, son un exquisito ejemplo de su obra en pequeño formato, con poesía original, una escritura vocal de gran bravura, sensibilidad y conocimiento, explorando las capacidades expresivas de la voz y los instrumentos que la acompañan.
En su colección personal, conservada en la Biblioteca Estatal de Dresden, Maria Antonia guardaba unas Arie con istromenti que la donna María Teresa Agnesi (1720-1795) le había dedicado. El mecenazgo de Maria Antonia fue clave para esta compositora y cantante milanesa, proveniente de una familia de intelectuales, en la que destacaba su hermana, la célebre matemática Maria Gaetana. Sus doce arias son un emotivo homenaje a la princesa, escritas en el mismo periodo que las de ella. Incluimos en el programa de hoy la bellísima In questo estremo addio, junto a una de las numerosas sonatas que escribió para su instrumento, el clave, conservada en la Biblioteca Estatal de Berlín.
Thaleia desea así iluminar la obra de estas dos mujeres excepcionales, cuyas vidas y creaciones se cruzaron en un momento histórico único, mostrando una perspectiva femenina del mundo musical que tanto falta en nuestros libros de historia y programaciones de conciertos.